Actividad
de diagnóstico
1. ¿Cuál es el principal motivo por
el que crees que es importante leer?
A. Porque aprendo mucho
B. Porque me ayuda a imaginar cosas
o situaciones
C. Porque me enseña a expresarme
mejor
D. Porque me hace sentir bien
E. No es importante leer
2. ¿Sueles leer libros en tu tiempo
libre?
A. Nunca
B. Alguna vez
C. Todos los días
3. ¿Cuál de los siguientes textos
prefieres leer?
A. Folleto
B. Cómic
C. Cuento
D. Boletín informativo
Hola!
Ahora
vamos a conocer juntos la estructura de un cuento 👍
🛑
¡Alto!
¿Sabes
que es un cuento?
¿No?
No te
preocupes yo te digo
Es una narración
breve, oral o escrita, en la que se
narra una historia de ficción con un reducido número de personajes, una intriga
poco desarrollada y un clímax y desenlace final rápidos.
Ahora
vamos a conocer la estructura de un cuento:
Observa
la siguiente imagen…
Actividad 1
Pon mucha atención. Esta es tu primer tarea, lo que tienes que hacer es observar el siguiente vídeo y en la caja de comentarios me dirás ¿Por qué es importante saber leer y escribir?
https://www.youtube.com/watch?v=25iYNr7UorE
RECUERDA QUE ESTARÉ REVISANDO TODO LO QUE ESCRIBAS, Y EN LA CAJITA DE COMENTARIOS TE RESPONDERÉ DE ACUERDO A LO CONSIDERE PUEDAS MEJORAR. 💖
UNA VEZ REALIZADA LA ACTIVIDAD CONTINUA CON LA SIGUIENTE 👇
Actividad 2 ¡ALTO AMIGUITO! Es momento de concentrarnos
- Lee el siguiente texto con mucha atención y contesta lo que se te solicita (las instrucciones están al final de la lectura)
La sirenita
Érase una
vez un reino submarino de gran majestuosidad, donde habitaban todas las
criaturas marinas que el hombre solo ha conocido en su imaginación y viejas
leyendas. Este reino era gobernado por el sabio rey Tritón, el cual tenía cinco
bellas hijas sirenas.
La menor
de todas se llamaba Ariel, quien superaba a sus hermanas en belleza, pero
también en curiosidad y atrevimiento.
La
sirenita Ariel soñaba con ir hacia la superficie del mar para conocer la
belleza del cielo y conocer de cerca a esas inteligentes criaturas llamadas
humanos.
Conocedor
del profundo interés de su hija, Tritón vivía preocupado y continuamente le
decía que cuando cumpliese 15 años podría subir a la superficie, pero que nunca
le permitiría acercarse a los humanos.
Ariel
contaba los días para la marcada fecha. Así, cuando esta llegó pidió permiso a
su padre y con la venia de este fue sin dudarlo a la superficie.
Ciertamente
el cielo era tan lindo como se lo habían descrito. Tras unos minutos de deleite
vio un extraño cuerpo que se acercaba al sitio exacto donde estaba.
Era un
barco y quedó impactada por la majestuosidad de tan rara construcción.
De
inmediato se refugió tras una roca para no ser vista, pero lo suficientemente
cerca como para saber quiénes iban a bordo de la embarcación.
De esa
forma vio por primera vez en su vida a los humanos y quedó particularmente
prendada de uno: el joven Eric, quien era el capitán de la tripulación y en su
honor se estaba festejando con verdadero jolgorio.
Sin
embargo, la felicidad de los humanos se vería importunada.
Una
rápida tormenta se formó y fieras olas zarandearon el barco, tirando por la
borda a gran parte de sus tripulantes, Eric entre ellos.
Al ver
esto la sirenita Ariel no podía quedarse impasible.
De
inmediato se dirigió a donde estaba Eric, luchando por su vida pero
prácticamente inconsciente.
Ariel lo
ayudó a llegar a la orilla y allí lo dejó. Mientras lo contemplaba con una
mirada de amor, el joven Eric despertaba de su letargo y por unos segundos
contempló a la bella muchacha que le había salvado la vida.
Quedaron
enamorados a primera vista, pero Ariel sabía que era imposible, por lo que huyó
a las profundidades del mar antes de que el príncipe pudiese verla bien.
…
Pasaron
unos días y ninguno de los dos podía dejar de pensar en el otro.
Ariel
estaba profundamente enamorada y cada día se escapaba en las tardes a su
refugio secreto, donde había reunido restos y enseres de la embarcación que
había conocido.
Tan raro
era su comportamiento por esos días, que su padre la siguió y al descubrir qué
era lo que con tanto celo guardaba su hija, se enojó mucho.
Quería
protegerla de la crueldad humana a toda costa y por ello no dudó en destruir
los tesoros de Ariel con verdadera furia.
La
sirenita se sintió muy triste y castigada por su padre.
No
concebía por qué se le negaba lo más lindo que había sentido y tenido en su
vida: el amor.
Sin saber
qué hacer, fue a ver a la malvada bruja Úrsula, para ver si con su magia negra
podía ayudarla a convertirse en una mujer humana.
La bruja
de largos tentáculos la convirtió en mujer como deseaba, pero la privó de su
principal encanto: su voz.
Le
explicó a la sirenita, ahora bella muchacha, que tenía tres días para besar al
joven Eric. Si no lo hacía en ese lapso, volvería a ser una sirena y no
recuperaría nunca su voz.
Ariel
aceptó el reto y se presentó ante el joven Eric, quien pensó que por el físico
era su amada, a la que soñaba cada noche, pero dudaba constantemente dado que
aquella tenía una bella voz y la que estaba a su lado no podía hablar.
Durante
tres días fueron varios los momentos en que la pareja pudo haberse besado, pero
Úrsula impidió que esto ocurriese.
En su
malévola mente tenía un plan y era apoderarse para sí de la voz de la sirenita,
con lo que adoptaría su forma y sería ella quien se casase con el príncipe.
…
Llegado
el término del plazo el plan de Úrsula se materializó. Ariel volvió a ser
sirena y la bruja adoptó la figura de la bella muchacha, con su voz y todo.
Hechizado,
Eric le propuso casarse enseguida a la bruja y creyó que Ariel era una malvada
criatura que lo había engañado.
Por suerte,
antes del sí quiero todos los animales y criaturas marinas, que adoraban a la
sirenita Ariel y querían su felicidad por encima de todo, el rey incluido, que
había recapacitado, acudieron en ayuda de la niña e impidieron la boda.
Rápidamente
descubrieron a Úrsula y se las arreglaron para que Ariel recuperase su voz.
Eric cayó
en la cuenta de que había sido engañado, por lo que acabó con la vida de la
bruja y no dudó en besar a Ariel, aunque fuera una sirena.
Pero
sucede que con el beso los sueños de ambos se cumplieron. El amor todo lo puede
y la cola de Ariel se convirtió en un par de lindas piernas.
Así, la
pareja vivió feliz para siempre y lograron establecer la armonía entre el reino
de los hombres y el de las sirenas